La de usos que tienen las escobas.
Las brujas, que ya debían conocer sus virtudes, se pegaban unos buenos viajes montadas en ellas.
Hoy en día, ya no tenemos brujas surcando los cielos. Por lo menos, que yo sepa. No por eso, vamos a relegar a estos palos con pelillos a cosas tan simples como barrer, ¿verdad?
Dicen por ahí, que si barremos los pasos de una persona que no es de nuestro agrado, alejará las malas vibraciones.
También dicen por ahí que si ponemos una escoba detrás de la puerta cuando un indeseable nos visita en casa, marchará rápidamente.
Dicen por ahí.
Verás.
En casa, vivimos tres personas y una hurona, Arian. Un amor.
Las personas, también.
Un buen día, una indeseable llamó a la puerta.
Respondía al nombre de Fibromialgia.
Una petarda. Una mal educada. Una asquerosa.
Entró sin pedir permiso. En mi desespero, hice de todo, incluso poner la escoba detrás de la puerta.
Pero no marchó. Así que tuve que afrontar su presencia de otra forma.
En la guía de fibromialgia, hablamos de esto. Y de muchas cosas más.
Guía para mejorar tu vida con fibromialgia
Mayka Ortiz.
