Pues eso, que me largo a Francia.
Mayka, ¿qué narices se te ha perdido en Francia?
Nada.
Oh! Ala!
Pero si no se te ha perdido nada, ¿qué vas a hacer?
Explorar. Calma, que ahora te lo explicaré todo.
Ah, vale … por cierto … ¿sabes hablar francés?
No sé decir ni una palabra en francés. Bueno sí, Oui, pero mejor no lo digo indiscriminadamente, no sea que alguien me pida el coche o dinero y yo toda alegre, le diga Oui, Oui!!
Oh mon amour, que chungo, no me estoy enterando de nada!
Verás.
Me encantan las cosas antiguas, los castillos, mansiones, palacios … vamos, cosas con encanto, de hecho, no hace falta ser un lince para deducir de donde viene el nombre del proyecto El Encanto Del Pasado donde realizo exploración de estos lugares.
Hace años que sigo a creadores de contenido que van a visitar castillos abandonados y alucino con lo que encuentran. Siempre imagino cómo sería vivir en esos lugares, el ambiente, los olores, la ropa, las intrigas de palacio.
Un viaje en el tiempo.
Un buen día, me harté de ver lo que hacían los demás y me pregunté, ¿porqué no puedo hacer yo lo mismo y en vez de ver como otros disfrutan, disfrutar en primera persona?
Y zás … dicho y hecho.
Ya no veo cómo otros crean contenido del que disfruto (bueno, alguno sí), ahora lo creo yo misma, viajando, explorando, yendo a muchos sitios, incluso Francia, donde si nada falla, veré varios castillos y mansiones que saldrán en El Encanto Del Pasado.
Mucha atención a lo que te voy a contar ahora.
Fíjate que podríamos decir que toda esta aventura comenzó cuando la fibromialgia llegó a mi vida y mando mi vida profesional a la mierd*, la no profesional, un poco también.
No sólo me repuse a ese momento, aunque el dolor me acompañe a diario, sino que me lancé a hacer lo que de verdad me entusiasma … y de paso, a ganar dinero con ello.
Sí, ganar dinero, ya sabes, paso de ser políticamente correcta, necesito pasta, money para vivir, no sé porqué parece que sea tan malo decir abiertamente lo que todos sabemos en nuestro interior.
Bien.
Ante estas cosas que te cuento que hago, hace poco, alguien me envió un correo y me preguntó:
“Hola Mayka, ¿cómo haces para tener tanta energía con la fibromialgia? Hay días que yo no puedo ni levantarme.”
La respuesta no es fácil, ya que energía, lo que se llama energía, no es que me sobre y dolor tengo, sin embargo he logrado un equilibrio y fortaleza mental para afrontar [casi] cualquier cosa que venga por delante.
Y está todo aquí.
Así que ya sabes, puedes seguir viendo cómo los demás hacen lo que te gustaría hacer a tí, o lo puedes hacer tú misma.
Abrazos de algodón.
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